| ROIPRESS | EXPERTOS | ESPAÑA (EUROPA) - La integración de diferentes soluciones o aplicativos proporciona a las pymes un acceso fácil y seguro a gran cantidad de información. Pero, además, impulsa la comunicación a todos los niveles, ya sea entre equipos, áreas o diferentes centros de coste. Con eso, los responsables del negocio tienen la posibilidad de acceder a una fotografía clara y real del estado de situación de la empresa, incluso a través de informes detallados, estadísticas o recopilación de históricos.
Los sistemas de gestión de recursos empresariales -ERP- permiten eliminar barreras e, incluso, si se está trabajando en remoto, acortar las distancias entre las múltiples ubicaciones y mantener un flujo de datos continuo. Con ello, no solo se consigue acceder a la información, sino hacerlo, en tiempo real, sobre la marcha, es decir, en el momento en el que se necesite, con la certeza adicional de que la información que se obtendrá será 100% actual y veraz.
Isabel Pomar, CEO de Datisa dice que "la integración permite acceder a la información e incrementa su nivel de confiabilidad, elimina la redundancia de datos, facilita su análisis en tiempo real, y ayuda a identificar necesidades, fortalezas, debilidades y oportunidades escondidas entre la cantidad de información con la que se trabaja a diario en las distintas áreas del negocio".
La integración y cohesión de la información también está facilitando el trabajo en remoto, en las pymes, convirtiéndose en un catalizador del negocio en plena era Covid. En este sentido, permite a las organizaciones mejorar la toma de decisiones para optimizar sus procesos y su operativa, minimizando su margen de error. Pero, lo más importante de todo es que una pyme que disponga de la tecnología adecuada para integrar la información con la que trabaja estará más y mejor preparada para profundizar en los valiosos datos de que dispone.
En este sentido, Datisa resume en estos cinco, los beneficios clave de la integración, desde el punto de vista de la información y los datos:
Los sistemas de gestión de recursos empresariales -ERP- permiten eliminar barreras e, incluso, si se está trabajando en remoto, acortar las distancias entre las múltiples ubicaciones y mantener un flujo de datos continuo. Con ello, no solo se consigue acceder a la información, sino hacerlo, en tiempo real, sobre la marcha, es decir, en el momento en el que se necesite, con la certeza adicional de que la información que se obtendrá será 100% actual y veraz.
Isabel Pomar, CEO de Datisa dice que "la integración permite acceder a la información e incrementa su nivel de confiabilidad, elimina la redundancia de datos, facilita su análisis en tiempo real, y ayuda a identificar necesidades, fortalezas, debilidades y oportunidades escondidas entre la cantidad de información con la que se trabaja a diario en las distintas áreas del negocio".
La integración y cohesión de la información también está facilitando el trabajo en remoto, en las pymes, convirtiéndose en un catalizador del negocio en plena era Covid. En este sentido, permite a las organizaciones mejorar la toma de decisiones para optimizar sus procesos y su operativa, minimizando su margen de error. Pero, lo más importante de todo es que una pyme que disponga de la tecnología adecuada para integrar la información con la que trabaja estará más y mejor preparada para profundizar en los valiosos datos de que dispone.
En este sentido, Datisa resume en estos cinco, los beneficios clave de la integración, desde el punto de vista de la información y los datos:
- Accesibilidad a los datos mejorada. Acceder a la información es más fácil, rápido y seguro. Esto conduce a una toma de decisiones inteligente a todos los niveles, tanto en el plano operativo, como estratégico y funcional.
- Optimización de la comunicación. Incluso operando en remoto, si la información está integrada y cohesionada y si la conectividad es óptima, con independencia de los aplicativos que utilice la compañía, el resultado será que todos los miembros de la organización podrán obtener fácilmente la información que necesiten para el desempeño de sus funciones.
- Incremento de la productividad. Hacer que la información "fluya" y que se disponga de la tecnología adecuada, etc. facilita el día a día de los equipos. Y, eso, impacta directamente sobre sus niveles de productividad y rendimiento. No tener que buscar los datos a través de diferentes rutas de acceso, o en distintas aplicaciones, además de evitar duplicidades y garantizar la consistencia de la información, elimina los tiempos de respuesta y la sobrecarga adicional de trabajo. Todo el mundo puede dedicar más tiempo a las tareas que son cruciales para su puesto y, al mismo tiempo, todos estarán en mejores condiciones de impactar sobre el crecimiento del negocio.
- Centralización. Almacenar toda la información relevante, y facilitar el acceso y la compartición de datos centralizando la información. Acceder a todos los datos relevantes, simplemente con un click, elimina las funciones administrativas y las pérdidas de tiempo innecesarias, implementando un modelo de trabajo mucho más flexible, ágil y dinámico.
- Apostar por el futuro. Salvo que la pyme opere en un sector esencial, es difícil que la empresa pueda experimentar un crecimiento en 2020, dadas las particulares condiciones sobre las que nos estamos desenvolviendo. Sin embargo, apostar por la consolidación del negocio y la planificación a medio plazo puede ser una buena estrategia para aprovechar el tiempo. Y, en este sentido, es importante no enredarse en un complejo entramado de aplicaciones y sistemas que dificulten la disponibilidad de información clave. Disponer de los datos integrados y consolidados ayuda a plantear diferentes escenarios y simular opciones sin tener que acceder a diferentes plataformas para encontrar el dato necesario.
En definitiva, teniendo en cuenta todas estas cuestiones, es evidente que la integración y coherencia de la información con la que cuenten las pymes puede ser de ayuda para que puedan salir reforzadas de esta crisis.
